Bangkok Dangerous fracasa en su estreno americano, mientras El caballero oscuro ya se encuentra en el puesto 29 de las más taquilleras de la historia

Se veía venir. Cuando una película americana se estrena en su país más tarde que en muchos lugares del resto del mundo la cosa no sale bien en la taquilla. Sus responsables no se fiaban mucho de ella, y la dejaron para este mes, en el cual la taquilla de Estados Unidos no cuenta prácticamente con ningún estreno destacable para arrasar en las salas. Sin ir más lejos, el único estreno a gran escala de la semana ha sido el de la película que nos ocupa. Ni con esas el remake de Bangkok Dangerous ha conseguido atraer espectadores a los cines. Y es que los casi 8 millones de dólares recaudados en su primer fin de semana no dan ni para pagar el peluquín que luce Cage. La película cuenta con un presupuesto bajo para lo que suelen ser las películas de acción en Holywood, tan solo 45 millones de dólares. Aun así, se las vera y deseara en todo el mundo para doblar dicha cantidad, y por tanto reportar beneficios en su paso por los cines. Por el momento, se espera que por estas tierras no recaudará más de 20 millones, lo que significa otro fiasco más en la carrera de Cage, que en los últimos años solo se ha salvado por las dos entregas de La búsqueda y relativamente con El motorista fantasma.

Por lo demás, El caballero oscuro ya ha pasado los 500 millones de dólares, situándose como la segunda película más taquillera de la historia en Estados Unidos, solo por detrás de Titanic, que acumuló 600. En la lista de las más taquilleras de la historia con las cifras ajustadas a la inflación, El caballero oscuro se sitúa en el puesto 29. La secuela de Batman Begins terminará su recorrido comercial alrededor de los 530 millones, y probablemente superará los 1.000 millones en todo el mundo. Otras películas de las que he ido hablando en semanas anteriores siguen de mal en peor. Es el caso de Death Race, Mirrors y Babylon A.D, con 29, 27 y 17 millones respectivamente, y con la mirada puesta en el mercado mundial para ver si sus cantidades mejoran y no se convierten en los fiascos que hoy por hoy son. El caso de La momia: La Tuma del emperador Dragón es excepcional. Aunque en Estados Unidos ha pinchado, recaudando unos ajustados 100 millones (56 menos que la primera entrega, y 105 menos que la segunda), los más de 200 que lleva amasados en el resto del mundo son suficientes para que la jugada les haya salido bien a sus responsables. Y cuidado que pueden empezar a hablar de una cuarta entrega.