jueves, 7 de agosto de 2008

Death Race (La carrera de la muerte el año 2.000) (1975)

“En el futuro, cada año se celebra en Estados Unidos una carrera de la muerte en la que sus oponentes se asesinan entre si, además de conseguir puntuación atropellando a personas que circulan por cualquier sitio. Un grupo rebelde en contra de tal carrera sigue la pista de uno de sus principales concursantes para acabar de una vez con el espectáculo macabro y cambiar al gobierno”.


Hasta su recuperación por parte de Tarantino con la magnifica Kill Bill, David Carradine había dejado su popularidad basada en gran medida en la popular serie televisiva Kung Fu. En su filmografía hay varias decenas de títulos, ya sea como protagonista, como secundario o incluso figurante, pero la gloria que adquirido con dicha serie no fue suficiente para que posteriormente llevara en los cines una carrera exitosa. Entre todo lo que hizo después de la serie, además de una película basada en la misma, se encuentra la que probablemente sea una de las más míticas: La carrera de la muerte del año 2.000. Y es mítica por su propia presencia, y por una mucho más sorprendente si vemos la película en la actualidad, la de Stallone. Poco antes de hacerse mundialmente famoso e incluso recibir un Oscar (al mejor guión original) por esa obra maestra que es Rocky, el musculoso ítaloamericano ya había hecho sus pinitos en algunas producciones de bajo presupuesto (incluida una película porno llamada El semental italiano), y entre ellas se encuentra la que hoy nos ocupa.

La carrera de la muerte del año 2.000, al contrario de lo que puede parecer en los primeros minutos, se convierte a medida que avanza el metraje en una critica social bastante acida a la alineación del personal a manos del gobierno americano. En un hipotético futuro del año 2.000, en el que el gobierno de Estados Unidos ofrece como mayor espectáculo del año una carrera de coches en la que se puntúa por atropellar gente y de la que solo puede quedar vivo un concursante. Pero no todo el mundo disfruta con el macabro espectáculo. Un grupo de rebeldes que planta cara al gobierno actúa a escondidas en la carrera, metiendo a uno de los suyos como copiloto del protagonista.

Pese a la nada sutil carga crítica, lo que en realidad se recuerda de la película no es otra cosa que sus escenas de violencia. Puede que, cual Michael Haneke y su Funny Games, lo que intenten los responsables de La carrera de la muerte del año 2.000 sea jugar con la violencia como parte de la critica hacia el espectador morboso que disfruta de ella, aunque, a diferencia de la citada película de Haneke, en la protagonizada por David Carradine el interés planea directamente sobre el papel que juegan esos momentos en la acción. Y que coño, estamos ante una caspa que únicamente se disfruta como entretenimiento delirante, por lo que, si sus pretensiones eran tales, fracasó. No tanto como el divertimento salvaje que por momentos es. Lastima que entre tanto se hable demasiado de cosas que no interesan y no tengamos más y más momentos de Carradine, Sly y el resto de personajes hilarantes luchando por ganar la carrera. El remake ya se encuentra listo para estreno. Por cierto, la película es un claro referente del posterior y polémico videojuego llamado Carmaggedon, y esta producida por el incansable Roger Corman.

Lo mejor: Cuando la película se centra en la carrera y en los bizarros momentos que en ella no cesan. Alguna cosa dentro de la crítica social tampoco desmerece. Y Sly haciendo de villano antes de operarse la boca es digno de entrar en la colección de todo cinéfago que se precie.

Lo peor: La perdida de ritmo en muchos momentos de sub tramas, en los cuales se deja la carrera en un segundo plano. También se hecha en falta más gore.

Valoración (0 a 10): 6

Trailer

3 comentarios:

crimental dijo...

Que entrañable y delirante es esta pelicula, ademas es la segunda reseña que hice para mi blog.
Haber que tal esta el remake porque soy fan incondiconal de Jason Statham.

The Horror Blog dijo...

Buen blog.

Te hemos añadido en THE HORROR BLOG.

Saludos.

Cesare dijo...

Es una pelicula que despierta realmente mi interes, pero que nunca he tenido oportunidad de verla, a ver si lo soluciono pronto...