Danny Boyle, mejor o peor, se ha propuesto labrarse una carrera variada. Su siguiente película tiene poco que ver con la anterior, y esa con la precedente. Ha tocado el thriller, la tragicomedia, el drama, el terror, la ciencia ficción e incluso ha experimentado dentro de la inclasificable. Por tanto, no sorprende que su nueva película, 127 Hours, se aleje tanto de su anterior y exitosa (aunque también sobrevalorada) Slumdog Millonaire (2008), de su obra maestra Trainspotting (1996) o de la interesante 28 días después (28 days later, 2003), por citar algunas. La que nos ocupa, protagonizada por el ¿ascendente? James Franco, nos mete en la historia (verídica) del alpinista Aron Ralston, el cual, tras sufrir un accidente en unas montañas de Utah, se vio obligado a amputarse el brazo para sobrevivir. Así, parece que 127 Hours nos depara un drama con elementos survival y mensaje de superación, todo ello rodado, si nos fiamos por el trailer, con el dinámico estilo de Boyle. El 12 de este mes tendrá lugar su premiere en el festival de Toronto y, aunque de España poco se sabe aún, en Estados Unidos ya tiene fecha de estreno comercial: 5 de Noviembre.
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