Flight of the Living Dead: Outbreak on a Plane (2007)

También conocida como Plane Dead, se trata del exploit de un exploit. Es decir, una película realizada a rebufo de un éxito, aunque en este caso dicho “éxito” se trate de un producto de explotación como cualquier otro. Hablo, obviamente, de la entretenida Serpientes en el avión (Snakes on a Plane, 2006). La variante la encontramos en que, en lugar de serpientes como amenaza tenemos zombis. Por lo demás, todo es muy similar. Un avión transporta una carga secreta bastante dudosa. Debido a un accidente con el material, la tripulación comienza a ser infectada transformándose en zombis hambrientos. No faltarán los típicos personajes estereotipados (el policía heroico que acompaña a un preso, el cual es más amable de lo que parece, las azafatas buenorras, el famosillo de primera clase, el piloto que está a punto de jubilarse). Tampoco faltará el humor negro imprescindible para que no creamos que se estén tomando en serio tal delirio.

Lo bueno es que posee una factura por encima de la media en estos subproductos. Sus responsables manejan bien los pocos recursos económicos (los efectos especiales no están mal, y el maquillaje sorprende en ocasiones). No obstante, al principio la cuesta arrancar, y tenemos que esperar casi hasta la mitad para empezar a ver buena carnicería. Cuando ésta se desata podremos contemplar algunas explosiones de gore, muchos tiros al cráneo, divertidas bromas (atención a como acaba el personaje de la monja justo cuando decide dejar de rezar, o como sobrevive uno de los personajes porque el zombi que le muerde es una anciana sin dentadura) y en general todo lo que puede ofrecernos, con sus limitaciones, un producto como este. Lo dicho, mejor de lo esperado.

En resumidas cuentas: Buena