El remake de La última casa a la izquierda se estrena de forma correcta, mientras que Wacthmen se desinfla en su segundo fin de semana

El remake de La última casa a la izquierda (The Last House of the Left, 1974) se estrena de forma correcta en Estados Unidos, acumulando 14 millones de dólares en sus tres primeros días. Lo cierto es que se esperaban algunos millones más en tales días, pero dado su ajustado presupuesto, el resultado no ha sido malo. En su recorrido final por estas tierras es posible que se quede con un total de 35 millones, por lo que, si los sumamos a lo que recaude en el resto del mundo, algún beneficio dará.

Pero a la que se le ponen las cosas feas es a Watchmen. Tras recaudar unos correctos 55 millones de dólares en su primer fin de semana en tierras estadounidenses, su descenso ha sido de un abrupto 67%, dejando su resultado, tras diez días, en 88 millones. De seguir esta tónica, es fácil pensar en un resultado final alrededor de los 120 millones. El problema no son ya esos 120 millones, que saben a poco siendo la propuesta que es, sino que en el resto del mundo no esta funcionando del todo bien. Con suerte, su total mundial andará en unas semanas por los 250 millones, una cifra que no hace justicia a los 150 millones que se han gastado en producirla. Considerarla de fiasco seria demasiado, pues se trata de una de esas películas que llevan tras de sí una legión de fans que se dejarán el dinero en el dvd y el Blue Ray, así como en diverso merchandising, pero sin duda, en su exhibición en cines, Watchmen ha resultado una decepción.