martes, 9 de diciembre de 2008

Kilómetro 31 (2006)


Una mujer siente la muerte, en un accidente de coche, de su hermana gemela. Tras ir a la carretera, comprueba que, efectivamente, su hermana a muerto. Antes de morir, habían hablado por teléfono, y la comentó que había atropellado a un niño, pero allí no hay ni rastro de él. Es precisamente en ese punto de la carretera, el km 31, donde irán sucediendo cosas inexplicables para su hermana, su novio y la pareja de la fallecida.

Tras ver Kilómetro 31, me resulta del todo sorprendente que en Méjico se convirtiese en una de las películas más taquilleras de la historia de aquel país. Y es sorprendente porque se trata de una película de terror mediocre, aunque con una buena produccion, que recorre caminos que ya hemos recorrido una y mil veces, mezclando las influencias del estilo Shyamalan (atmosfera fría, pulso narrativo pausado, giros sorpresa) con los golpes de efecto pos Ringu (ídem, 1998), incluyendo, no podía ser menos, los espíritus infantiles de melena negra al viento. La película, alternando los ingredientes como si de un autoservicio se tratase, queda más cerca de las decenas de propuestas que siguieron, con poco tino, a dichos referentes, que de los referentes en si mismos. Tampoco ayuda el aviso, al comienzo, de estar inspirada en hechos reales, cuando lo que vemos tira hacia la fantasía, exagerada en ocasiones, más que a pretender mostrar datos veridicos.

Co-producida entre Méjico y España, y estrenada en cines con el eslogan publicitario “De los creadores de Rec” (mentira de las gordas, a no ser que se refieran a que Filmax se encuentra en la producción), Kilómetro 31 tiene en su reparto al español Adriá Collado, que nunca parece saber muy bien que cojones hace paseando por la trama, y dos interpretes mejicanos, que, estos si, lo hacen realmente bien: Iliana Fox y Raúl Méndez. El director del invento se llama Rigoberto Castañeda, que con este Kilómetro 31 realizó su opera prima, para después dirigir varios episodios de la serie televisiva mejicana Trece miedos (ídem, 2007-¿?) y actualmente se encuentra inmerso en la pre producción de la que será su próxima película de corte fantástico, de titulo Alegorías.

Lo mejor: La factura es impecable, y se nota que Rigoberto Castañeda sabe como mover la cámara (hay varios planos sensacionales).

Lo peor: El guión es flojo. Le falta interés, una mayor garra, y sobretodo un sentido del ritmo más apropiado, pues si las películas de Shyamalan son una maravilla, y para nada aburren, pese a tener un tempo pausado, es porque lo que cuentan, y como lo cuentan, es interesante. Este no es el caso.

Valoración (0 a 10): 4

Trailer

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Cierto, cierto. Lo de siempre y medriocrilla... algún hallazgo nada más. Pero es que a todos nos hace ilusión que en nuestro país se haga algo que hasta entonces sólo se hacía fuera. Supongo que poer eso triunfó en México.

Davo Valdés dijo...

Es cierto que es una pelicula mediocre en cuanto a contenido pero con una gran producción.

Por cierto se escribe México y mexicanos con X. Hace muchos años que se dejó de escribir con J.

¡Saludos desde México!

Machete dijo...

No me daba buenas vibraciones cuando salió, suerte que no fuí a verla.

Hombre Lobo dijo...

En realidad, el D.R.A.E permite la escritura tanto de "México" como de "Méjico". Otra cosa es que los mejicanos prefieran que se escriba "México", pero ambas formas son correctas.

Y en cuanto a la película, creo recordar que por aquí tuvo un paso por las carteleras muy fugaz. Lástima porque recuerdo que en su momento me interesó.

Sir Laguna dijo...

Pues a mi me aburrio increiblemente... ZZZZZZZZZZ ZZZZZZZz ZZZZZZZZZ

Davo Valdés dijo...

Nuestra Constitución especifica que el nombre es Estados Unidos Mexicanos. No creo que el diccionario real de la academia española tenga jurisdicción en como escribir el nombre.

¡Saludos!

Sam_Loomis dijo...

Aquí en México causo mucho de que hablar (previo a su estreno) ya que era una producción de terror con buen presupuesto, etc. pero a mi me pareció como dices tu, mediocre, un montón de pegostes de ideas y escenas que ya hemos visto que no tienen mucho sentido. En lo personal, siento que a nadie le gustó del todo (juzgandome simplemente con personas con las que he platicado) ya que la inflaron demasiado. Tiene buen estilo, pero nada de substancia.

Saludos